Convertido en el suceso más importante de cada año en la vida cultural de Nayarit, CITA (Coloquio Integral de Teatro y sus Alternativas) nació justo por la necesidad de acontecimiento de tal característica.
Octavio Campa Hernández, su creador hace doce años, especifica la realización de incontables reuniones e intensas pláticas entre teatreros para dar paso al CITA, por tanto rechaza la idea de que haya “brotado de una sola cabeza”, aunque haya sido él el promotor de amalgamar propuestas para consolidar el proyecto.
Como cada noviembre del año, en el actual tuvo desarrollo en Tepic la duodécima edición del Coloquio Integral de Teatro y sus Alternativas con la participación de once grupos/compañías con igual número de puestas en escena en los diferentes foros teatrales de la ciudad.
Es común observar en este tipo de encuentro la democrática reflexión entre los integrantes de la comunidad teatral, charlas colectivas que permiten conocer motivaciones para la creación y expresión escénica de las obras teatrales, tropiezos, desatención oficial, etcétera.
Asimismo, la intervención de directores, actores, iluminadores, escenógrafos y técnicos, entre otra parafernalia, en lluvia de ideas de horas.
Entrevistado por el reportero de la gente, Octavio Campa Hernández, coordinador del CITA, admite que mucho se congratula en decir que el coloquio es el evento de teatro más importante de Nayarit.
“No obstante no deja de darme preocupación que a través de doce años el coloquio no sea reconocido por parte de las autoridades obligadas a apoyar los procesos culturales, las que en lugar de vernos como un proceso de crecimiento y patrimonio de Nayarit, nos tienen aislados como si fuéramos una actividad no importante para el desarrollo del teatro”.
Le pregunto en qué se inspiró para la creación del coloquio de teatro.
“La carencia en realidad fue la madre del coloquio, la carencia de actividades específicas al teatro. En el pasado reciente no teníamos ni siquiera la oportunidad de reunirnos una vez al año, lo cual se ha logrado desde la existencia del coloquio. Es pues esta necesidad de reunirnos, de aprender, de dialogar y seguir adelante en el proceso teatral, es lo que obliga a la creación del CITA.
¿Ha sido un difícil caminar?
“Ha sido difícil. Como sin duda alguna es difícil hacer todas las cosas que valen la pena. En momentos con la idea de imposible su realización, pero hoy la constancia nos ha demostrado que hacer el CITA está muy lejos de ser imposible, es una realidad tangible no exenta de dificultades. Sin embargo, el abandono en que nos tienen las autoridades competentes no permite, de alguna manera, tener un crecimiento sostenido ni desarrollo del coloquio y a su vez ni avance teatral”.
Esta expresión, el coloquio de teatro, que tuvo su origen en nuestra entidad, tiene replica en Monterrey, Nuevo León, y Los Mochis, Sinaloa. Dos sitios a donde Octavio Campa Hernández como director ha encabezado para su participación al grupo Júbilo Colectivo Escénico.
En Monterrey, por ejemplo, Campa Hernández recibió testimonial reconocimiento de la dirección artística del coloquio representada por Carlos Gueta y Yolanda Salinas, al mismo tiempo un audiovisual destacó la trayectoria del nayarita ante representantes teatrales procedentes de diez estados del país, en el mismísimo Teatro de la Ciudad de Monterrey.
El director de teatro concluye la entrevista con esta sentencia:
“Preocupa que no sólo no se tenga apoyo para el CITA de parte de las instituciones, sino que las instituciones mismas no hacen nada para apoyar el teatro. Es decir, lo que están haciendo, que no alcanzo a comprender la magnitud de lo que hacen, ha tenido resultados, y los resultados son terriblemente ínfimos”.