Por: Oscar Zúñiga
¡Hijo e’ su! No cabe duda que cuando el río suena es porque agua lleva, un dicho muy popular entre las viejas generaciones de nuestra sociedad, pero bueno, hace unos días dimos a conocer una denuncia pública de los hechos que están sucediendo en el Instituto Mártires 20 de Febrero dependiente de la Universidad Autónoma de Nayarit, pero administrado por el SETUAN en manos de la familia del Diputado Manuel Hernández Escobedo (a) «El Pelón».
Claro que a raíz de esta denuncia comenzaron a surgir más, de antemano nos dan a conocer que los padres y madres de familia no se atreven a opinar siquiera, mucho menos a reclamar alguna inconformidad ya que pertenecen al sindicato de trabajadores de la UAN, y por lo tanto no desean ser sancionados. Hacemos la aclaración, estas denuncias son verídicas y aquí les damos a conocer otra de las irregularidades de la directora del Instituto y sus familiares.
Debemos decir que la directora de esta escuela primaria es la hija del líder sindical Manuel Hernández Escobedo, hacen constar los quejosos que el sistema educativo es bueno, sin embargo el sistema implementado en el pasado ciclo escolar de nada ha servido, las y los niños nunca han utilizado sus LAP-TOP, cuyo costo fue 5 mil pesos y fue pagado por cada padre de familia, habiendo deficiencias del mismo programa, pero al parecer a la familia Hernández esto no le importó.
El segundo problema mas importante que nos señalan aquí los quejosos es el pésimo trato que se les da a los padres de familia por parte del personal administrativo de toda la escuela, es decir, el trato es con prepotencia y cero flexibilidad como toda escuela militarizada, ahora la directora no se diga, señalan que honestamente no tiene nada de educación, pues en todas las reuniones escuchan lo mismo de ella, «YO y YO», es la yoyo de la escuela y sin ella no funciona nada.
Pero otro de los detalles es que hace constantes reuniones de padres de familia y por inasistencia les cobra 150 pesos, además de que al año hace 10 talleres, y aquí de igual forma por inasistencia se pagan los mismos 150 pesos, señalan los quejosos con justa razón que algunas veces no pueden asistir por sus trabajo a dichas reuniones ya que por semana son hasta dos o tres veces, pero eso a la hija del «PELÓN» no le importa, les cobra sus 150 pesos.
Ahora ya les dieron otro nuevo anuncio, pues el certificado de quienes saldrán de sexto grado les costará 200 pesos extras. Los padres de familia se preguntan a dónde irá a parar tanto dinero, pues aun como trabajadores de la Universidad es imposible perder tanto tiempo en juntas que muchas de las veces ni valen la pena, por último dicen que ojalá y alguna autoridad educativa vea bien el trasfondo de todo esto porque es muchísimo dinero el que tan solo obtienen de las multas. Servidos quejosos.
Por principio de cuentas, no es la primera o la última de las escuelas «privadas» que es denunciada, porque este instituto no es público, pero desde hace tiempo este tipo de denuncias se ha dado, ya que estas escuelas al parecer no cumplen cabalmente con el reglamento de la SEP pero aun así dicen tener maestros certificados en cada materia lo cual resulta ser falso y de esto la SEP les sirve de tapadera.
Por lo que urge una investigación y una reglamentación por parte de quien corresponda, donde todo este tipo de cobros por cualquier cosa no se lleven a cabo, así como la debida certificación de maestros, pues si pagas debes de exigir buenos resultados. pero bueno aquí en el Instituto Mártires 20 de Febrero de la UAN, los padres de familia pagan y hasta ellos son maltratados por los directivos que son la familia de su líder sindical, «Viva México Cabrones», solo falta que algún güevon invente la clase sindical para que la emparejen con la clase «política», al fin y al cabo las dos ya nos gobiernan, que ya hasta el Saldate dice «SOMOS EL PODER».
si le rascan sale mas pudrición en ese mentado sistema que es mas bien un rincon mas de explotación de los trabajadores universitarios ya que para ellos no se compara el sueldo de un maestro para cubrir las en cuotas, castigos y cooperaciones pero para la sangrada familia no es mas que disciplina sindical
esto del mentado cendi no es mas que otro negocio particular pagado con el presupuesto universitario, no es mas que una rebanada del pastelote de la UAN , no se duda que hasta las servidoras del hogar de estas familias cobren en la UAN para muestra nada mas que la flamante esposa es del mentado voluntariado universitario (otro resumidero de dinero) y por eso trae chofer para que la lleven a escuchar los filosoficos ilustrados discursos llenos de esperanza que ningún otro ser mundano pueda dirigir los corderos digo los destinos de la clase trabajadora de su sindicatos ,.
todo esto es para que hay de aquel que se atreva a discernir del insustituible dirigente que hoy lleva ya dos periodos de diputados ademas de los eternos periodos que les esperan a la mentada clase trabajadora de la UAN y digo esto porque ya tiene cuando menos tres generaciones preparadas para que lo sustituyan como cualquier enrique octavo y que.
Por necesidad de tiempos he mantenido a mi hijo en este llamado Instituto Mártires 20 de febrero y efectivamente estás prácticas abusivas están sucediendo hastá la fecha y dudo mucho que alguna autoridad gubernamental ponga un alto. Dicen preocuparse por la economía de los padres de familia y ocurre todo lo contrario. Hoy tuve que pagar una multa de 100 pesos por un atraso de pago de alimentos de 5 días, cuando el pago quincenal es de 400 pesos , es decir el 25% sin nungún día de tolerancia. No logre una cita de atención por parte de su directora, siendo que la tenía a la vista a 3 metros sentadita en su lujoso escritorio. Un trato abusivo e inhumano.
A mi hijo le han prohibido la entrada y se ha quedado llorando ante la mirada insensible de la guardia escolar cuando nos pasamos terminando su maqueta hasta altas horas de la noche y todo porque no pude en ese preciso instante pagarles las dichosas multas. Muchos callamos por temor a las represalias y trato discriminatorio a nuestros hijos al interior del plantel.