La Yunta

Por: Oscar Zúñiga

¡Hijo e’ su! Siguen las polémicas en las redes sociales sobre las medidas que supuestamente tomó Vialidad Municipal con su reglamento que hicieron al vapor, hace algunos días manifestaron su inconformidad miembros de una organización de ciclistas (no profesionales), quienes están en contra de que el nuevo reglamento les exija traer casco, además de que los niños ya no podrán pasearse en bicicleta si son menores de doce años.

Fue una jalada mental de quienes adaptaron este reglamento que ni en las ciudades más sofisticadas del mundo está en vigor, pero bueno,  a casi un mes de dar a conocer este reglamento la Secretaría de Seguridad Pública y Vialidad de Tepic, no ha podido con su propio paquete, como ejemplo, el verdadero peligro radica en los motociclistas que ninguna autoridad los ha podido meter en cintura, pues estos siguen transitando sin casco y con más de dos personas en el vehículo llevando y exponiendo a un accidente a casi toda su familia que viaja con él.

Pero eso sí, Karin Cabrera dice no tener personal suficiente para cubrir las necesidades que requiere nuestra capital, mientras este bocón dice esto, vemos que los vehículos oficiales de esta dirección andan circulando como transporte de personal de esquina en esquina disque haciendo campaña vial.

Pero en qué cabeza cabe que hagan su campaña un día en una esquina del centro de nuestra ciudad, hay que recordarles que no toda la gente hace lo mismo cada día ni transita por la misma calle y que con una solo vez que se encuentren las «Gatitas de Pourcel», perdón, digo las modelos de Karin Cabrera, que por supuesto de agentes de vialidad tienen lo que yo tengo de astronauta, y quieren que con esto la gente se concientice en la conducta de la vialidad.

Lo mejor sería que todo el dinero que colectan en multas lo utilicen para la reparación de sus unidades y para el pago de gasolina, digo si es que no tienen combustible para que todas las patrullas salgan a trabajar, o la otra, que le bajen el suministro de gasolina a Karin, ya que hasta sus vehículos particulares son abastecidos con dinero del pueblo, esta información nos la proporcionaron  del interior de esta dirección vial porque ya están hasta la madre de tantas chingaderas según dicen.

Lo cierto es que los accidentes siguen a la orden del día, esto cuando la responsabilidad cae en un agente carretero que vino a enseñarle el padre nuestro al cura y que la verdad, los resultados están a la vista, por cierto, quién sabe de dónde sacó unos agentes que ya tienen o pasan la edad de jubilación y que nunca se habían visto como tales, mismos que a las horas pico se resguardan de los inclementes rayos solares, y ni modo el mísero sueldo que les pagan no merece ni las mentadas de madre que reciben estos nuevos agentes.

En cambio, los protegidos del «Mil Amores» del Rojas, esos sí hasta modelan cuando se bajan de sus motocicletas, se ven toda la mañana varios agentes motociclistas en la esquina de la calle Abasolo esquina con Avenida México, pero bueno, los aciertos que pudo haber tenido Karin Cabrera y su discípulo el Rojas que le vendió espejitos, no dieron resultado, pero desgraciadamente bien dice el dicho, si la cabeza está mal el cuerpo también lo está.

Lo cierto es que ahora hasta los niños están asustados, pues ya no podrán usar bicicletas porque al bembo de la Dirección de Tránsito se le ocurrió esta brillante idea de que los niños son un peligro, no pensaron que la mayoría de los niños de esta edad usan su bicicleta en los alrededores de sus casas y no se van al centro de la ciudad a obstruir la circulación, o que si salen a las calles alejándose de su hogar siempre van acompañados de sus padres o una persona adulta, aquí demuestran su bajo criterio y enseñan su cerebro de mosquito.

Ahora solo falta esperar que salgan a manifestarse los miembros de esta asociación de ciclistas, y esta será la primera marcha que se hará con justa razón, lástima que Antorcha Campesina ya tiene a la ciudad también harta de tantas marchas, plantones y cierres de calles que hace con tan solo treinta gentes, por dios, dónde están las autoridades que han dejado que estos líderes vividores hagan lo que les de su gana haciendo perder a otras persona miles de pesos con sus plantones.

Ojalá y el Lic. Edgar Veytia tome cartas en este asunto de los plantones, pues si Tepic tuviera el mando único otro gallo nos cantara, habría más respeto entre todos los ciudadanos, se acabarían o bajaría el índice de robos a casa habitación, negocios y a transeúntes, el control de la vialidad sería mejor, hay que recordar que Veytia ya manejó esa Secretaría y no le van a contar las perlas de la virgen, pero bueno, esos son sueños guajiros que habrá que pedírselos también a Santa Claus, lo único que podemos decir ahora es que la soberbia es mala consejera.