Por: Sergio Mejía Cano
En las instalaciones del Laboratorio de Arte Teatral y Escénico del Estado de Nayarit (LATEN) que se encuentra por la calle Morelos 139 oriente, en el Centro Histórico de Tepic, Nayarit y cuyo director es el licenciado, Luis Alberto Bravo Mora, se llevó a cabo una conferencia el pasado día martes 21 de este mes en curso, para informar sobre la celebración del Día Internacional de las Personas de Talla Baja, que es el día 25 de octubre.
En esta conferencia estuvieron a cargo el señor, Carlos Monroy, presidente de la Asociación de Gente de Talla Pequeña y la señora, Patricia Gutiérrez, concejal de esta asociación y mamá de una niña de talla baja.
El señor Monroy dijo que para recabar fondos se llevará a cabo un desayuno en conocido restaurante situado por la avenida Allende, esquina con San Luis, en el centro de Tepic, el próximo día 25 de este mes, en donde con este año ya serán cinco en los que celebran esta fecha, así como un concierto que se denominará “Dos voces, dos aguas” el que iniciará a las 18:00 horas precisamente en las instalaciones del LATEN; pues con los fondos que se recaben se utilizarán para que asista una delegación del estado de Nayarit representando a la asociación de gente de talla baja a un congreso internacional que se efectuará en días próximos en la ciudad de, Irapuato, Guanajuato.
Señaló el señor Monroy que este día es muy importante para las personas de talla baja, pues es una forma de llamar la atención, ya que, si bien existen leyes para las personas de talla baja, estas por lo regular no se aplican; agregando que sí ha habido políticos que se acercan a estas agrupaciones o viceversa y reciben la respuesta de que sí les van a ayudar para que se les ponga más atención, pero hasta ahí, porque siguen sintiendo y recibiendo discriminación, con problemas en lo laboral y en lo escolar, principalmente por estar fura de su alcance la mayoría de todas las cosas como por ejemplo, lavabos, baños, escaleras, etcétera.
Abundó el señor Monroy que la asociación de la que ahora es presidente ya tiene 19 años de lucha, de acuerdo a lo expresado por la señora, Patricia Gutiérrez y, si bien su estatura pequeña ya se considera como discapacidad, aun así en el transporte urbano casi nunca les quieres hacer el descuento correspondiente de pagar la mitad del pasaje; pero sobre todo, otro problema que sufren la mayoría, si no es que todas las personas de talla baja, es lo alto de los estribos para abordar un camión y, si les toca viajar de pie se tienen que asir de los respaldos de los asientos, pero a veces se topan con que unos no traen de dónde agarrarse.
La señora Gutiérrez señaló que en estos 19 años de lucha constante para poder hacerse ver sí se ha avanzado, pero muy poco, porque hay muchas personas de talla baja que no se han podido colocar o encontrar un trabajo digno, precisamente por su baja estatura, como si de la estatura dependiera la capacidad mental y física; así que debido a esta discriminación que sufren en lo laboral, hay gente de talla baja que se ha autoempleado o tienen trabajo con familiares que tienen algún negocio o comercio pequeño. Aunque también y como casi siempre, hay personas de talla baja que saben moverse haciendo trabajos artesanales, de albañilería -con las dificultades que esto significa-, fontanería, arreglando aparatos eléctricos y electrónicos, etcétera.
Sin embargo, lo triste del caso es que en esta asociación hay abogados, psicólogos y otros profesionistas que no encuentran trabajo precisamente por ser de talla pequeña, según el señor Monroy, quien afirmó además, que por su baja estatura muchas de las veces son víctimas de burlas, de risas, ya que al ir caminando con otras personas “normales” al dar un paso estas personas, los de talla bajo tiene que dar dos o tres pasos y, aunque sean familiares hay ocasiones que esos mismos familiares les dicen que apuren el paso. Lo mismo o parecido sucede al momento de sentarse en una silla ante una mesa; pero como no están las condiciones que se les dice normales, hasta para cambiar un foco a una persona de estatura media le basta con un pequeño banco, pero a la gente de talla baja es obvio que se le dificulta un poco más, pues no basta con un banco, sino que se requiere una escalera en vez de un banco.
Abundó el señor Monroy que hay rampas en la mayoría de las banquetas en el centro, para la gente en sillas de ruedas, pero que también le sirve a la gente de talla baja, porque hay machuelos altos difíciles de subir.
Sea pues. Vale.
