LA DESPOSESIÓN DEL CAPITAL TURÍSTICO EN NAYARIT

logoPor Octavio Camelo Romero

Una de las expresiones del capitalismo contemporáneo caracterizado por Carlos Marx en “El Manifiesto del Partido Comunista” como el “capitalismo universal” es la forma actual de la “acumulación originaria” que se presenta como la “desposesión” de la tierra o de los medios de producción de quienes todavía no se integran en las filas del proletariado o del lumpenproletariado.

Este fenómeno se manifiesta de múltiples maneras, pero todas con la complacencia del Estado y con la adecuación de la legislación pertinente. Así sucedió con la desposesión de los ejidatarios para dar paso a la inversión del capital canadiense en la minería mexicana, así está sucediendo con los palaperos y pescadores del sur de Nayarit y de Puerto Vallarta Jalisco y así sucederá con quien detente la posesión de las regiones dónde el capital transnacional selecciones el destino de su inversión.

Y es que la sobreacumulación del capital exige para su acumulación normal de la liberación de las regiones previamente ocupadas. Este es el fenómeno que se está viendo con las acciones del capital transnacional del grupo Vidanta o Mayan Palace. Tal grupo Vidanta o Mayan Palace construye caminos y obras día y noche desde su hotel en Nuevo Vallarta, Nayarit para comunicarse con la playa Boca de Tomates, Jalisco, donde cuenta con una concesión de ornato según informa el alcalde vallartense Arturo Dávalos.

Pero esta acción trae aparejada la expulsión de pescadores y palaperos de Boca de Tomates, Jalisco o por lo menos la reubicación de ellos por carecer de permisos federales para la realización de sus actividades, que desde hace más de 40 años las familias vienen realizando en ese lugar.

En su avance de obra el grupo Vidanta ha tomado la Isla de Los Pájaros, refugio de aves migratorias ubicado en medio del río Ameca, que divide a Jalisco y Nayarit, y ha cercado parte del cauce del lado de la tierra de los Coras. Y por si fuera poco, los caminos y obras que se construyen allí, incluido el campo de golf, son vigilados las 24 horas por agentes privados que recorren las riberas del río en cuatrimotos y camionetas.

Evidentemente que todo esto está sucediendo con la complacencia y el apoyo de los gobiernos de Nayarit, Jalisco y Federal. Queda perfectamente claro que los gobernantes sirven al capital transnacional más que a los microempresarios mexicanos. Estos últimos estorban a los planes del capitalismo planetario o del capital global como dijera el presidente Enrique Peña Nieto.

Por otra parte y como consecuencias de las obras del grupo Vidanta, este ha intentado desalojar a vecinos de Jarretadares, Nayarit, quienes además de haber resistido el acoso, desde hace más de seis años han denunciado a la empresa que está sacando grava y arena de El Ameca. Sin embargo las autoridades locales y federales de ambas entidades no se dan por aludidas.

Los trabajadores palaperos y pescadores dijeron estar dispuestos a defender la riqueza de flora y fauna que existe en Boca de Tomates, integrado por el estero Bocanegra con grandes extensiones de mangle y decenas de cocodrilos, además de un área de desove de tortugas que están en peligro de quedar en manos de este proyecto, si se concreta el ambicioso plan de acumulación del capital del grupo Vidanta. En fin.

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