La Yunta

Por: Oscar Zúñiga

¡Hijo e’ su! No hay nada para que los nayaritas nos alarmemos por el incendio del edificio de finanzas de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN), pues la historia nos trae muchos recuerdos de nuestra Alma Mater, solo que para esto tendremos que recordar todo lo que se ha venido arrastrando a causa de los grupos políticos que se disputan el poder  en su interior y que desde sus inicios la han tenido como rehén.

Para esto hay miles de profesionistas que vivieron en carne propia las represiones que sufrieron como estudiantes, pues desde los inicios de la universidad, estos grupos políticos formaron dos frentes estudiantiles, uno fue la FEUN y el otro la Unidad Liberal Benito Juárez (ULBJ), este último se dice fue financiado por el gobierno al cuál perteneció el ahora honorable Lic. conocido como «El Bachis».

Cuya acción de la ULBJ era la de neutralizar a todo aquel estudiante que no comulgara con los interese políticos de aquellos tiempos y gobiernos, este mismo grupo de la Unidad Liberal se dice que fueron los autores del secuestro al ex rector Pedro Ponce de León, en 1974, pero curiosamente el ex rector después de aparecer nunca presentó cargos ni aceptó haber sido secuestrado.

Lo que sí podemos decir es, que de los personajes pertenecientes a la Unidad Liberal Benito Juárez, aun quedan muchos con vida, ya que otros ya fallecieron, pero ahora nos reservamos su nombres ya que sus vidas dieron un giro de 360 grados y ya son personas honorables de nuestra sociedad, pero con la disolución de este grupo no quiere decir que la Universidad de Nayarit haya quedado libre de corrupción.

Pues los grupos que luchan por mantener el poder a su interior siguen, esto a pesar de que esto ha sido causa de algunas muertes de trabajadores universitarios, aun así nunca ha habido una intervención directa de ningún nivel de gobierno, eso sí, podemos decir que el pago a los «dirigentes» estudiantiles por mantener el «orden» al interior de la universidad, hasta hace algunos años era un puesto por el PRI como diputado  en el Congreso de nuestro Estado.

Así fueron pasando décadas hasta que nuestra Alma Mater llegó a su punto final, el desfalco del que se habló hace poco tiempo de más de 1500 millones de pesos, noticia que causó grandes polémicas, pero que al final no hubo respuesta ni solución por parte de las autoridades en contra de quien se dice fue el más grande saqueador del patrimonio educativo de los nayaritas.

Juan López Salazar, penúltimo rector de la UAN, sigue desaparecido, se dijo hace tiempo que la Interpol ya lo buscaba, pero hasta ahora no hay respuesta de su paradero, y así fueron pasando los meses, hasta que de pronto hoy un día 19 de febrero del 2017, cuando ya la sociedad se había convencido de que el desfalco de la UAN quedaría en el olvido,  esta madrugada un incendio quema en su totalidad el edifico que albergaba la dirección de finanzas de la Universidad Autónoma de Nayarit.

Aquí es donde surgen de nuevo las dudas, fue una madrugada lluviosa, además la Universidad tiene decenas de «vigilantes» que cobran como tales, esto sin contar los cientos de «jardineros», claro, estos últimos no trabajan de noche ni de día, la primer pregunta sería, ¿este edificio que guardaba los valores más importantes de la universidad no contaba con un velador?

Digo, porque de ser así, deben de cambiar de inmediato al jefe de seguridad, por lo pronto las actuales autoridades universitarias se muestran sorprendidas de este lamentable «accidente», ya que por ahí nos dimos cuenta de que por fin la Federación haría una auditoria a la UAN, por lo que al no haber nada que revisar, lo más probable es que digan los de siempre, borrón y cuenta nueva.

Lo más curioso que esto de los incendios a finales de los sexenios también ya están haciendo historia, hay que recordar que con Celso, Rigoberto, y Ney fueron los más sonados, en este sexenio de Ney fue el Doctor Omar Reynoso el que estuvo en el ojo del huracán por más de 300 millones desfalcados a la Secretaría de Salud cuando él era el Secretario, y un mal día, un corto circuito incendio el archivo de Salud que se ubicaba por la calle Guerrero en el centro de nuestra ciudad.

Algo curioso de este incendio fue que se dijo que lo había provocado un corto circuito, y lo más raro es que a la llegada inmediata de los traga fuegos no pudieron hacer nada para sofocarlo porque el incendio estaba expandido por todo el lugar, raro verdad, lo cierto es, que la entonces Diputada Federal Ivideliza Reyes había denunciado este desfalco, que al final sucedió lo mismo que ahora, no había documentos que revisar.

Pero eso sí, Omar Reynoso fue premiado de inmediato con una diputación, más tarde al final de su carrera como diputado, sigue premiado y lo envían como director de la Universidad Tecnológica de Bahía de Banderas, puesto que ocupó para hacer política en sus aspiraciones a la presidencia municipal de ese municipio, pero de pronto le llega el cese fulminante, pues se dice que ya la universidad presentaba un desfalco detectado por una auditoria federal.

Por lo tanto, nada raro será que de pronto Juan López Salazar también salga premiado con un puesto político de esos que dar sin trabajar que los llaman plurinominales, pues si robó, desfalcó, o se gastó en sus frivolidades de nuevo rico tanto dinero, ya nadie se lo podrá comprobar, y si a esto le suman el fuero constitucional como el de Omar Reynoso, nada raro será que el día menos pensado vuelva a nuestra bella ciudad.

Por lo pronto hay que esperar el resultado del peritaje que hará la Fiscalía General del Estado, que de antemano ya se podría especular cuál será el resultado, en la madrugada, noche afuera lluviosa, de seguro fue un corto circuito generado como en el almacén de la Secretaría de Salud donde se incendió de inmediato todo el edificio.

Aquí lo único bueno y cierto será, que el Rector Peña González no se podrá quejar, pues a menos de un año de haber tomado las riendas de nuestra Máxima Casa de Estudios iniciará de ceros, su único problema será que no hay dinero ni papeles para comprobar, esta es será una historia más de las que suceden en Nayarit y que en unos días más la habremos olvidado.