Mascaradas y corrupción el pan nuestro de cada día en Nayarit

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Por: Oscar Zúñiga

¡Hijo e’ su! La verdad ya perdí la cuenta de los suicidios que van este año en nuestro querido estado de Nayarit, hasta ahora la Secretaría de Salud sigue sin hacer nada al respecto, pese a que el incremento va a la alza, no hay que olvidar que el mes de julio  al igual que noviembre y diciembre, han sido los meses donde más suicidios se registran.

Pero tal parece que para nuestras autoridades esto por ahora no es prioritario, y menos ahora que ya van de salida, en muchas secretarías gubernamentales ya tienen sus maletas listas, pues hemos visto que ya iniciaron las concentraciones de vehículos y otros enseres que se hacen como prestamos entre unas y otras secretarías.

Y la Secretaria de Salud bien gracias, creen que con estar mandando fotografías viejas del supuesto ataque frontal en contra del dengue y el chikungunya ya cumplieron su cometido, pero los resultados ahí están, hoy desgraciadamente fue encontrada una mujer de apenas 33 años de edad colgada en su casa, ¿cuáles fueron los motivos para quitarse la vida, quién sabe?, pero con esta muerte aumenta la estadística de los suicidios.

Por lo que entre las ejecuciones que se han estado llevando  a cabo en nuestra entidad y los suicidios, Nayarit no deja de estar de luto,  esto quiere decir que si faltan dos meses y días para que haya cambio de gobierno, en este tiempo ya ninguna secretaria trabajará al cien por ciento, pues ahora el pretexto es la entrega recepción del nuevo gobierno y la sociedad que se rasque con sus uñas.

Sabemos que hay gobernador, pero la pregunta es, ¿dónde está?, es muy cierto que la prioridad ahora es la seguridad, pero la salud de los nayaritas también cuenta, este sexenio fue un desacierto en la designación de los Secretarios de Salud, pues están a la vista los hechos, desabasto de medicamentos, mala atención en el Seguro Popular, aun cuando este recibe miles de millones de pesos anuales para atender a sus derechohabientes, y por último la falta de pago a sus trabajadores.

Con estas tres cosas pasó el sexenio sin que ninguna autoridad federal se diera cuenta, pues las auditorias al parecer salieron perfectas, ni siquiera hicieron falta los 300 millones de aquel desfalco que se dio en el sexenio anterior donde la Diputada Federal de aquel entonces Ivideliza Reyes denunció y al parecer no tuvo eco.

Pues el señalado de este desfalco fue premiado con algunos puestos públicos, y hasta tuvo la desfachatez de querer ser presidente municipal de Bahía de Banderas, esa es la maldita corrupción que vivimos los nayaritas, donde no pasa nada, y donde no hay castigo para los culpables.

Alguien por ahí me decía, el peor sexenio fue el de Ney González, y podemos decir que no, el peor es este, pues no hubo economía a pesar de que se estuvo cacaraqueando que Nayarit por aquí, que Nayarit por acá, la verdad es que no hubo circulante, pues hasta las obras realizadas por el Gobierno del Estado estuvieron en dos o tres manos, por lo que todos esos miles de millones de pesos que se dicen invertidos en obra pública no beneficiaron al pueblo.

Quizás solo fuero a engrosar las cuentas bancarias de quienes fueron los agraciados con estas construcciones, pero repetimos, no hubo dinero circulante, no creció la economía ni el empleo en Nayarit, solo sobresalió la empresa SUMITOMO, empresa que ya no siento lo duro, sino lo tupido, pues al llegar a Nayarit fue obligada a dar el triple de empleos que traía presupuestados, lo que hizo que los salarios de los trabajadores bajaran al mínimo y con pocas esperanzas de un aumento sustancioso, pues la empresa ya no puede con tanto empleado y más cuando a todos los tiene afiliados al Seguro Social.

Estos fueron parte de los miles de empleos, ahora podemos ver y decir a qué costo, y así como esto han sido las mascaradas de este gobierno, pero bueno, ya se van, desgraciadamente el daño a los nayaritas ya está hecho.

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