A los voraces comerciantes no les importa la salud de los nayaritas

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Por: Oscar Zúñiga

¡Hijo e’ su! Hasta cuando el gobierno de Nayarit hará valer su autoridad con fuerza para salvaguardar los derechos de los nayaritas a la salud. Ahora sí estamos donde al parecer queríamos estar los nayaritas para darnos cuenta de que esta pandemia del COVID-19 sí existe, esto a pesar de que el gobierno ha hecho su parte al querer hacer valer la ley, pero desgraciadamente la misma sociedad se lo ha impedido.

Somos mudos testigos de que los comerciantes se quejan siempre de las medidas que se han aplicado, pero, ¿acaso no se darán cuenta los comerciantes que la economía afecta a toda la sociedad no solo a ellos? Nayarit tiene casi un millón trecientos mil habitantes, esto repartido entre todas las edades, ahora de nuevo la pregunta es, ¿serán más los comerciantes que los habitantes de Nayarit?

Claro que no, y aun así son los que han llevado la batuta poniéndose en contra del gobierno y no han acatado al cien por ciento las medidas de seguridad. Ejemplo claro tenemos el centro de nuestra ciudad, ahí solo se encuentra ya con venta de productos de primera necesidad alimenticios el mercado Juan Escutia, el resto son comercios que no son de productos de primera necesidad incluyendo las loncherías y restaurantes.

La verdad es, que a la gente poco o nada le importa esta pandemia, vemos a diario centenares de personas que pasean por el centro en busca de chucherías como si estuviéramos en vacaciones de un verano como en años anteriores, gente de otros municipios y rancherías cercanas a la capital, que violando las medidas de seguridad impuestas por las autoridades no les importa la seguridad de otras personas.

Y los comerciantes bien gracias, ellos de eso ahora no se quejan, pues ahora son los únicos que reciben dinero en sus arcas, para ellos no existe la gente que ahora se ha quedado sin trabajo por los recortes laborales que se han hecho, tampoco les importa estar matando a la gallina de los huevos de oro, pero eso sí, a diario se lamentan en redes sociales como si fueran los únicos afectados por esta pandemia.

Pues bien, de ir a la baja, y que ni el gobierno de la Republica nos tomara en cuenta, mucho menos las televisoras nacionales, hoy sí, ya estamos en esos reflectores dentro de los estados que quedan con el semáforo rojo. Por lo que ahora urge que de nuevo el Gobierno del Estado aplique medidas mas contundentes sin hacer caso a comerciantes y a las redes sociales, que se aplique la ley con todo el rigor a quién la viole.

Asimismo, que se frene a todos los políticos que nadan desenfrenados en sus adelantadas campañas, que no le anden haciendo al tonto, en todo el tiempo que llevan ganado estratosféricas cantidades de dinero sin hacer nada, ahora sí andan buscando el voto regalando gel antibacterial y cubrebocas. Eso es algo que el gobierno debe evitar por la aglomeración de personas, que, aunque hay algunos que no logran reunir ni diez personas, pero ahí andan haciendo la mosca chillar.

Se que esto no le caerá bien a muchos comerciantes, pero es la verdad, por eso estamos a favor de que, de ser necesario para frenar un poco esta pandemia en Nayarit, que el gobierno ordene el cierre de todos aquellos comercios que no son necesarios para la subsistencia alimentaria en el centro de nuestra ciudad, que restrinja la entrada de personas que vienen de otros municipios a turistear.

Que se aplique la ley al transporte público, pues en la mayoría de camiones no se ha hace la sanitización y mucho menos llevan gel antibacterial para que la gente al bajar se ponga, que los choferes usen cubrebocas, que no llenen el camión como lo marca la orden sanitaria de la Secretaria de Salud, son muchas cosas en que el gobierno debe de fajarse los pantalones para que se cumplan sus disposiciones, de lo contrario seguirán aumentando las muertes en nuestro estado.

Pero bueno, nosotros no somos la ley, y mientras dios nos siga dando salud aquí encerrados seguiremos intentado en hacerle saber a la gente que, si no tiene a que salir a la calle, que no salga, y así cuida a su familia y cuida al resto de la sociedad.

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