Por: Oscar Zúñiga

¡Hijo e’ su! Lo que se dice que es una celebración, hoy las mujeres lo toman como un libertinaje. La historia nos marca lo siguiente como fundamento a esta celebración:

El día 8 de marzo de 1908

El 8 de marzo de 1908, un suceso transcendental marcó la historia del trabajo y la lucha sindical en el mundo entero: 129 mujeres murieron en un incendio en la fábrica Cotton, de Nueva York, Estados Unidos, luego de que se declararan en huelga con permanencia en su lugar de trabajo. El motivo se debía a la búsqueda de una reducción de jornada laboral a 10 horas, un salario igual al que percibían los hombres que hacían las mismas actividades y las malas condiciones de trabajo que padecían. El dueño de la fábrica ordenó cerrar las puertas del edificio para que las mujeres desistieran y abandonaran el lugar. Sin embargo, el resultado fue la muerte de las obreras que se encontraban en el interior de la fábrica. Ese mismo año, el 3 de mayo, se realizó un acto por el día de la mujer en Chicago, preámbulo para que el 28 de febrero de 1909, en Nueva York, se conmemore por primera vez el “Día Nacional de la Mujer”.

Con este antecedente, un año después, en 1910, se desarrolló la segunda Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, en la capital danesa, Copenhague. El tema central fue el sufragio universal para todas las mujeres, y por moción Clara Zetkin, líder del “levantamiento de las 20.000”, se proclamó oficialmente el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, en homenaje a las mujeres caídas en la huelga de 1908.

Más cerca en el tiempo, en 1977, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) designó oficialmente el 8 de marzo el Día Internacional de la Mujer. Luego, en 2011, se celebró el centenario de la celebración, con la premisa de Igualdad de Género y el Empoderamiento de la Mujer (ONU mujeres).

Pues bien, no nos vamos a ir muy lejos, simplemente analicemos lo que sucede aquí en Nayarit, concretamente en nuestra capital donde desde hace años una turba de jovencitas, que, por cierto, muy mal educadas y encapuchadas, han hecho y siguen haciendo desmanes que nada tienen que ver con esta celebración. Ejemplo de ello tenemos lo ocurrido hace unos años con la pinta del interior del Congreso del Estado, donde pintaron, valga la redundancia la pintura del líder del Congreso Constituyente de la República Mexicana, de Don Venustiano Carranza.

Esa vez fue identificada por medio de las cámaras internas del congreso la líder de estas jovencitas vándalas, pero resultó ser la hija del que fuera Oficial Mayor del Congreso del Estado, y que ahora es un flamante Magistrado del Tribunal de Justicia. Por lo tanto, no pasó nada, el presidente del Congreso del Estado (Polo Domínguez), no actuó como se debería de hacer, pues una cosa es pintar las bardas de la fachada de los edificios, y otra pintarrajear una pintura antigua con historia en el congreso.

No estamos en contra de que se manifiesten con sus reclamos, porque sabemos que muchas mujeres van a reclamar justicia por sus seres queridos (hijas) que fueron ultimadas o violadas, o simplemente mujeres que han sido maltratadas. Pero sí estamos en contra que estas jovencitas pubertas que hacen los desmanes, la mayoría ni siquiera han llegado a la edad adulta, muchas ni siquiera saben cuáles son los verdaderos reclamos de las mujeres que hacen estas marchas por necesidad de justicia, esto en un intento por buscar la atención de las autoridades.

Muchos han estado opinando en redes sociales que apoyan las pintas que hacen, ahora preguntamos, ¿su manifestación es en el lugar correcto? Claro que no, pues el lugar correcto el la Fiscalía General del Estado, ahí es donde se inicia la impartición de justicia con el recibimiento de las denuncias de cualquier delito, ahí es donde deben de protestar, ¿porqué hacerlo en Palacio de Gobierno? O ¿por qué hacerlo también en el Congreso del Estado?

Creo que la respuesta es simple, en la Fiscalía no las dejarían hacer lo que hacen, y, además, tampoco tendría muchas de ellas argumentos para pararse frente al Fiscal y reclamarle la falta de atención de justicia. Y lo peor, los ataques con sus pintas a la catedral de Tepic, me pregunto, ¿Qué tiene que ver la catedral con la impartición de justicia? Esto demuestra una vez más que lo que les interesa a estas jovencitas es sentirse empoderadas haciendo desmanes.

No culpo a las autoridades por esto, pero sí culpo a los padres de familia que saben que sus hijas asisten a vandalizar a sabiendas que no tienen motivos para llegar a esto extremos, muestra inequívoca de que como padres estamos fallando, ¿Dónde quedaron los valores morales que por generaciones nos inculcaron nuestros padres? Creo que esos ya no existen, ya son una historia más de los mexicanos, qué lástima, pero esto es el camino al libertinaje, donde al final, muchos padres algún día clamarán justicia por estas sus hijas.

Qué triste nuestra realidad, y qué triste que como sociedad tengamos que ver este vandalismo, pues recordemos, que al final como bien dicen, las bardas se pintan, pero las vidas no regresan, y sí tienen mucha razón, pero desgraciadamente todo esto se repara con dinero del contribuyente. Y como punto final, esto de las mujeres me recuerda a muchas madres que buscan a sus hijos desaparecidos, pero que en vida de sus hijos muchas gozaron de la vida con dinero mal habido, pero de eso nunca se quejaron.

¿Por qué cuando se dieron cuenta que sus hijos gastaban mucho dinero sin un trabajo estable y honrado no los corrigieron? Esta es una larga historia, pero desgraciadamente cada quién la escribe a su manera, por mi parte solo diré de nuevo, nos hace falta retomar de nuevo los valores morales. P.D. No importa, aceptaré la crítica que venga por decir esto que es la pura verdad.