Por: Oscar Zúñiga (Ojo, Veda Electoral)
¡Hijo e’ su! No cabe duda que la vida nos da algunos reveces que nos hacen quedar muy mal. La princesa jalqueña y yo, habíamos planeado una suntuosa fiesta para este próximo 15 de noviembre que celebramos nuestra entrada de la pubertad a la juventud, habiendo contratado previamente a Lalo Mora, ya que mi princesa esta ansiosa de que Lalo le dé un toqueteen en su voluptuosas “bubis”.
Todo iba bien, fue hasta que por ahí por la avenida México nos salió de la nada el Vizconde de Malinal, quien al saber de nuestra fiesta, él se ofreció a pagarnos un viaje a Jaguay, con boletos previos para que ella se tome la foto con los 5-0, y pues como ya deben de saber todos sus amigos, que el Vizconde es una persona muy noble y generosa y esplendida que no le pesa nada desprenderse de una bicoca de dinero para solventar nuestro viaje, pues aceptamos.
Debo decir de antemano, que ya habíamos hecho cientos de invitaciones, pues esto sería fenomenal, solo que el encargado de estos festejos andaba medio cabizbajo, solo que no sabíamos el porqué, pero como somos muy avispados de la mente, no tardó mucho en que nos diéramos cuenta de tan lastimera razón.
Primero, este señor a quien todos conocen como el “Fajamaleón”, el cuatrienio anterior comía con manteca, usaba ropa de las marcas Gucci, Lacoste y Hugo Boss, claro que esto es edición especial de acuerdo a su físico. En zapatos lo veíamos usando las marcas Alden Corthay, Edward Green o Jhon Lobb, y por supuesto, que estos eran originales, no como los que usa el nuevo Notario Público Hernández Quintero.
Digo esto, porque de acuerdo a uno de sus amigos muy, pero muy cercanos de Hernández Quintero del cual me reservo su nombre, pero su apellido es Herrera López, estos zapatos del señor notario son comprados en las segundas de la Lagunilla y en Tepito en la Ciudad de México. ¡Válgame dios, de lo que uno se viene a dar cuenta! Pero bueno, prosigamos con nuestro relato oficial, solo espero que mi princesa jalqueña no me regañe por adelantar esto.
Mi encuentro con el “Fajamaleón” fue un poco lastimero, hoy vestido también con ropa de retazos de los que se venden en la Dos de Agosto, y huaraches de eso que fabrica a mucha honra Polito Gutiérrez ahí por la calle Zaragoza en el centro de nuestra bella ciudad, creo que ya no es el mismo. Dicen que ahora en las Varas allá por Compostela lo han visto muy triste, pero eso sí, que le sigue echando muchas ganas de nuevo a la venta del tepache y cuidando muy bien su perol.
Creo que le cayó muy mal la cancelación de esta gran fiesta, digo, pues porque ahora con la pandemia hasta los coleros están escasos, ya la vida no es como antes, pero ahora todos ya estamos preparados hasta para vivir de aire, o mejor debemos tomar unas clases de Muay Thai con Don Julio Betancourt para irnos sacar algún dinerito extra rentándonos como golpeadores en el Bar “Mi tata”.
Pues este es el único bar que ya le quitó la primicia en los escándalos a los bares de los Altamirano, ya que ahora estos tres muchachos son los amos y señores de los “antros” en Tepic, y por lo visto ya son intocables, pero no, en caso de que el Vizconde de marcha atrás con el pago de la ida a Jaguay, ni de chiste iremos a esas cantinas donde los dueños fomentan las canciones de pura incitación a la violencia con los jóvenes haciéndolos que escuchen puros narco corridos del grupo Calibre-50 o del cantante Ariel Camacho y para variar, dicen que todo el alcohol que vende es adulterado, ya que a diario sacan a jovencitas arrastrando con solo haberse tomado un trago.
Y de estos antros ya son como cinco de estos muchachos, no, como último recurso me llevaré a mi princesa de perdida a comer con Tanilo, sirve que de paso ahí conozco a los nuevos diputados y políticos del actual gobierno, digo, esto es sin chacalear a nadie, y menos a mi amigo Pecas que ya también estrena guayaberas de esas que dicen en la Dos de Agosto que las traen de Yucatán, pero por ahí dicen que el Pavel Jarero se las merca de Colombia junto con sus pantalones de mezclilla, ¿será cierto?
Pero eso sí, el Pacas ya usa buenas cremas y perjumes ya no se pone los productos del Avon, ni tampoco huele ya a jabón chiquito, ahora dicen que lo que le preocupa es no encontrar en el mercado libre de Amazon el Fataché, porque ahora ya quiere adelgazar.
En fin, no cabe duda de que nadie está conforme con lo que tiene, como no quiero enfadarlos mucho, ya están avisados, el principado de Jalco y yo cancelamos la fiesta, y esto va también para que le avisen al Miguelón. Por último, si vamos a Jaguay, lueguito les mandaremos unas fotos por el feis.