¡Quiubo Melitón! Qué milagro que te dejas ver por esta tu casa, ya tenías buen rato que no te venías a dar una vuelta para acá. -Nombre mi Comando, si viera como está de revuelta la cosa ahí en la corporación, no cabe duda que hacen falta muchas gentes como usted, pues como usted dijo una vez, va llegar el tiempo en que los mande un pendejo, y vaya que ya llegó ese día.